Lo más importante es disfrutar la vida mientras podamos, porque andamos por ahí una sola vez y cuando se acabó, se acabó. W.A.

viernes, 14 de septiembre de 2007

Casi, casi Coca-Cola.

A casi 100años de existencia de la marca de zapatillas deportivas Converse, podemos recordar que: se fabricaron originalmente pensando en el deporte, especialmente el Basketball, que uno de sus éxitos se debe a que desde sus inicios no repiten diseños y que alrededor del mundo hemos visto a comunes y famosos portarlas con un dejo de orgullo que sin duda alguna nos hace querer un par.

El uso de Converse en los últimos años es evidente, se tienen negros, blancos, rojos, con diseños limitados y con el atrevimiento de decir que son casi la Coca-Cola de las zapatillas deportivas, es claro que no podemos hablar de un consumidor promedio; actualmente las personas que los adquieren van desde padres de bebés y niños de corta edad, adolescentes, jóvenes universitarios y por qué dejar fuera a los cientos de adultos jóvenes y abuelos que en un día cualquiera llevan puestos sus respectivos Converse. Cabe mencionar que no importando su estatus social, todos pueden tener un par.

Escuchando diversos comentarios de compradores de estos tenis que dicen “los compro por que son muy cómodos”, “los puedes combinar con lo que sea”, y abocándonos a uno que llama particularmente la atención, “ es que el acto de rebeldía que simboliza ponerse unos Converse con una minifalda, se siente tan bien…”, llegan algunas conclusiones: tanto así como cómodos no, porque estará usted de acuerdo que para caminar por ejemplo 1km, preferiríamos un zapato que se amolde mejor a nuestros pies y con una suela más flexible; son combinables, sí, pero por más que Gael García y Diego Luna llevan traje de gala con Converse en una entrega de premios, difícilmente veamos en la fiesta de XV años de nuestra hermana o en la boda de la tía a alguien vestido así.

“Icono de rebeldía” me decía alguien pero, con qué fundamentos se atreven a llamarlos así, si entre más los porten más consumistas e integrantes de la masa se hacen. Un rockero o alguien que escucha acid jazz, está vistiendo lo mismo que los seguidores de Madonna y Nirvana, a ello no podemos llamarlo originalidad o rebeldía ya que de ser un producto especialmente para deportistas, los tenis Converse se han convertido en un objeto fundamental para el consumismo y la sociedad de masas, los visten los más ricos y famosos, la clase media y hasta la baja consigue sus zapatillas de lona.

Por lo menos una persona de nuestra familia los calza, en la universidad es el accesorio básico para las clases y seguramente hasta el presidente de la republica es fan de ellos, hace dos años se dio a conocer que México poseía las más altas ventas de ellos en todo el mundo y dejando de un lado la moda para ser todo un clásico, los Converse, sean o no bandera de revolución, son ya una marca más de la famosísima Globalización.







9 comentarios:

Efímera dijo...

Y ya se que tu tienes un par, no te hagas.

Rafael López Castañón dijo...

totalmente de acuerdo





lo que no se es para que ponen tantos pretextos para usarlos


están padres y ya

por cierto que quiero comprarme unos, ya hace mucho que no uso


feliz no cumpleaños!!

Fa dijo...

efímera: De hecho tengo tres pares... pero los que más me gustan, menos uso =)

Anónimo dijo...

son lo maximo jaja de hecho me han dado ganas de comprarme otros jeje asi ke pos ni modo comprare unos mas para tener 4 jeje asi es el consumismo jaja padre el blog

Anónimo dijo...

yeah!

Hugo Reynaga dijo...

Lo más importante es que son bonitos, hay variedad y son baratos ^^

[No tengo esa foto =( ]

Eva María Ashanti Zaragoza Marín dijo...

Wow! me gustó! tienes toda la razón, es un accesorio indispensable y bastante cómodo!
Aunque los Vans le hacen la competencia, ahora hay modelos y formas más femeninas en los Vans. :D

P.D. Escribiste Madonna con una sola N y es con dos.

Saludos! buen fin!

Anónimo dijo...

[Alphard II]
Precisamente la semana pasada discutía con Fabián el tema de esos (agregue un adjetivo) tenis, sobre todo la hipótesis que desarrollé tras ir un día a comer a Las Américas y observar a la gente como es mi costumbre. Personalmente no me gustan, pero él los ama.

Eva tiene razón, es con doble N.

Anónimo dijo...

Primera vez que dejo comentario.. Si están cómodos pero no tanto! los mios no los uso porque ya me dejaron de venir :( , pero bueno no he pensado en comprar otros, aunque si lo haría!